La solución no es fácil. La disyuntiva de si sacrificamos paisaje para darle sitio a las placas fotovoltaicas también ha llegado a Maó. Su alcaldesa, Concha Juanola, hacía la siguiente reflexión en una entrevista concedida a Radio Menorca: "Ante la decisión de si le damos espacio a la instalación de placas solares o de si no las instalamos para preservar el paisaje, habrá que pensar qué es más importante. Y ahora quizás es preferible utilizar fuentes de energia limpia y renovable".
Esta valoración llega en mitad de un esfuerzo por parte de las administraciones municipal e insular de conseguir lo antes posible una transición energética que sea más limpia que la actual.
Mientras que hay un plan de desarrollo para que el gas ciudad llegue a los hogares de la isla, Juanola reflexiona sobre los costes que implicaría, con grandes inversiones para el almacenamiento de este combustible. El mismo gas podría ser la solución ideal para la central térmica de Maó, pero a falta de un gasoducto (otra gran inversión), el punto de mira sigue puesto en las energías renovables.
En los últimos tiempos, la merma que ha supuesto la avería de uno de los cables que nos mantenía conectados con Mallorca a nivel eléctrico, le da más viabilidad a la alternativa de las renovables.
Eso supondría, no solo tener energía limpia, si no que no dependeríamos de nadie para tener electricidad. Eso sí, probablemente a costa de sacrificar en algún sentido el paisaje de la isla. Juanola recuerda que actualmente hay un Plan Territorial Insular que está definiendo cómo se tendrá que abordar este asunto en el futuro.
¿Qué tiene que sacrificar Menorca para cambiar su modelo energético?
