No es una novedad. Existen desde hace años. Pero los nuevos sistemas se muestran cada vez más eficientes. Se utilizan mucho en terrazas de establecimientos, jardines o zonas en las que no abunda la sombra.
En latitudes donde los veranos son rigurosos ya se conoce esta técnica que permite lanzar agua en el ambiente, pero de forma que difumina esta agua en micropartículas como si se tratara del rocío de la mañana.
Al imprimir fuerza a la salida de agua con una bomba de presión y con la tecnología que descompone el chorro en gotitas de agua muy pequeñas, la impresión es que se forma una nube. Habitualmente se sitúan los puntos de salida en lo alto de pérgolas, columnas o elementos del espacio donde va a actuar este sistema.
Se utiliza en zonas públicas, parques y jardines o espacios privados. Muchas terrazas de bares o restaurantes que tiene poca sombra lo aplican y el resultado es muy agradable para combatir el calor.
Algo que se debe tener en cuenta es que es mejor utilizar agua lo más limpia (depurada) posible. Cuanto menos cal u otros elementos contenga, mejor funcionará el equipo.
Se consigue reducir de manera importante (una media de siete grados) la temperatura ambiente. El agua cae humedeciendo el ambiente (la mayor parte de los sistemas ni siquiera mojan el suelo) y es que si hay sol, la fuerza de la evaporación impide que las pequeñas gotas se precipiten del todo.
La diferencia entre los sistemas que se pueden encontrar en el mercado van desde los sistemas de baja presión (3,5 bares) hasta los de alta presión (a partir de 70 bares). A más presión, más cantidad de agua, boquillas difusoras y partículas más pequeñas de agua se consiguen.
A pesar de lo que podría parecer, el consumo de energía de estos equipos es bajo, así como el de agua (3 litros por hora en un equipo medio).
Otros elementos a destacar de este sistema es que consigue eliminar olores desagradables, capta polvo en suspensión, siendo muy recomendable para personas con alergias y reducen la presencia de insectos voladores.
Los sistemas de nebulización se utilizan también en viveros de plantas o en granjas, gracias a sus propiedades que benefician a la flora y a la fauna que huyen del calor.