Puerto de Maó. Noche oscura, sonrisa de luna. Herencia británica. Como británicas, jamaicanas, galesas, escocesas y yemeníes son las raíces de UB40. El antepenúltimo protagonista de Lazareto Festival conquistó al público con su propuesta de temas propios y covers que han convertido al grupo de Birminghan en uno de los referentes musicales de las últimas décadas. El “karaoke” de los recitales de Carmona+Makandé, Ana Torroja y Los Secretos cambió de lengua y un público, integrado mayoritariamente por británicos- que comentaban animadamente el éxito del concierto en el viaje de vuelta, incapaces por momentos de canturrear- disfrutó con el despliegue de UB40, formación que atesora más de cuatro décadas en el panorama musical. Con ellos, franceses y españoles, todos dispuestos a secundar a la banda y dando un ambiente inmejorable al espacio escénico del enclave portuario. Pese a ello, hubo que esperar a que los nueve músicos volvieran al escentario tras haberse retirado cuando se cumplía una hora de concierto, para que los que aún permanecían en sus asientos, se dejaran contagiar por el ritmo de la música. Fue ese el momento elegido por UB40 para ofrecer al público dos de los temas que más han contribuido a su fama mundial. Sus versiones de Can’t help falling in love, de Elvis Presley, y Red Red Wine, de Neil Diamond, pusieron el broche de oro a casi dos horas de concierto que a más de uno le supieron a poco. El relevo lo toma este viernes otra banda icónica del panorama musical, en este caso latino, Nacha Pop. Quien no haya vivido aún la singularidad de Lazareto Festival, podrá hacerlo de la mano de esta formación, integrada originalmente por Nacho García Vega, Carlos Brooking, Antonio Vega y Ñete, y que recala en Menorca con su tributo a una trayectoria repleta de avatares y de canciones que integran la BSO de chicos y chicas (de ayer y de hoy). |