Acuestan al animal y lo atan firmemente con cuerdas. Luego, uno de los domadores se sienta a horcajadas sobre él y le apreta la cabeza hacia abajo, mientras otros dos refuerzan los anclajes para que no haya peligro cuando adultos y pequeños se acerquen a hacerse fotos en breves instantes. Incluso, sentados en su lomo. Es lo que ocurre con un tigre siberiano en un zoólogico emplazado en la provincia china de Hunan. Aunque no ha trascendido si es una práctica habitual en los espectáculos, los métodos de los domadores que se pueden en el vídeo que enlazamos a continuación no parecen sacados de la improvisación.
Y el que sufre es el animal. Su cara muestra en todo momento una situación de incomodidad y cuando es soltado no duda a la hora de saltar y salir de la habitación en la que se encuentra de forma rápida. Durante los últimos días, diversas asociaciones animalistas han mostrado su rechazo a estas prácticas en Twitter y Facebook. De hecho, las redes sociales han echado literalmente humo por culpa de este tema.
Te dejamos con el vídeo colgado en la red social Youtube para que decidas por ti mismo…