Con la ayuda de la solidaridad menorquina, Emilio Chamizo, fotógrafo y activista, ha logrado con éxito su noble objetivo de llevar ayuda humanitaria a las zonas afectadas por el conflicto en Ucrania. Su incansable esfuerzo por proporcionar leche infantil a las familias más necesitadas ha culminado con la entrega exitosa en la ciudad de Odessa, a pesar de las adversidades climáticas que enfrentó en su travesía.
El compromiso de Chamizo con la población civil de Ucrania no es nuevo, ya que en sus viajes anteriores al país pudo establecer vínculos con diversas asociaciones dedicadas a brindar apoyo a aquellos afectados por la violencia y la destrucción. Consciente de la urgente necesidad de alimentar a los más vulnerables, especialmente a bebés y niños pequeños con escasos recursos, Emilio organizó una campaña de recogida de leche infantil mediante puntos de recolección y eventos.
La situación en Ucrania es desgarradora, con familias que enfrentan violencia, traumas, destrucción y separación debido al prolongado conflicto. Los niños, en particular, son víctimas mortales o resultan heridos, sufriendo traumas profundos a causa de la guerra. La magnitud de los desplazamientos de población y los ataques a infraestructuras esenciales, como escuelas y hospitales, ha alcanzado niveles comparables a los de la Segunda Guerra Mundial.
Como ya informó Menorcaaldia.com, desde el 24 de febrero de 2022, fecha en que el conflicto se intensificó, han nacido al menos 247,440 niños, un promedio de 903 bebés cada día, de mujeres que vivían en Ucrania. Estas cifras, registradas hasta finales de 2022, subrayan la urgente necesidad de asistencia para este segmento especialmente vulnerable de la población.
La campaña coordinada por Chamizo incluyó la recogida de leche infantil en farmacias, en la Ferretería Nura y en otros puntos, permitiendo a aquellos que deseaban contribuir comprar y dejar donaciones. La leche en polvo, que tiene una mayor durabilidad, fue seleccionada para asegurar que las donaciones llegaran en condiciones óptimas a las zonas afectadas por la guerra.
El fotógrafo regresó al lugar donde anteriormente documentó el drama de la guerra y estableció contacto con la asociación que atiende a los bebés y niños de las familias afectadas. La entrega exitosa de la leche infantil no solo representa un logro personal para Chamizo, sino también un rayo de esperanza para las familias que enfrentan condiciones adversas en medio del conflicto.
